ATENTADO EN YEMEN.

Siete españoles fallecieron en un atentado en Yemen. Los autores, una célula de Al-Qaeda. No hace mucho, varios militares españoles también fallecieron en otro atentado del mismo grupo terrorista en Líbano. En Londres, han abortado un atenado en pleno centro de la capital británica. Estamos viviendo tiempos duros. El terrorismo islamista está asestando duros golpes a nuestras democracias. Da igual que estés de vacaciones en Yemen, en Egipto, en Turquía, o en Londres o Madrid. La amenaza se extiende por todo el mundo. De hecho, Al-Qaeda ha señalado a los turistas occidentales como objetivos para las células locales de su oganización terrorista.

Quieren que sintamos miedo, en cualquier momento de nuestra vida y en nuestros propios países. Por suerte, tenemos unas fuerzas de seguridad que están trabajando para desarticular estos comandos terroristas y garantizar nuestra seguridad, como acaba de quedar patente recientemente en Gran Bretaña. Los terroristas quieren plantear el conflicto como un choque entre civilizaciones, entre occidente y el Islam. Pero esto no es así. Es un choque entre la democracia, y el terrorismo. Y en este sentido, tenemos que confiar en los servicios de inteligencia y en las fuerzas de seguridad. No nos queda otra. Permanecer unidos, no hacer un motivo de enfrentamiento político el terrorismo islamista, diferenciar entre terrorismo islamista y el Islá, que en ningún momento propugna la violencia,  y seguir trabajando en pro de la libertad y de la democracia.

Por último, sólo nos queda transmitir nuestras condolencias a los familiares de los fallecidos en Líbano y Yemen, y condenar estos salvajes atentados.